AMALIA.
—Ok, ¿lista? —niego—. Lo tomare como un "sí".Veo su puño aproximarse a mi y muy apenas lo logro esquivarlo y me siento orgullosa de eso cuando siento un golpe en el estomago.—Ya hemos hablado de estar siempre alerta y preparada para el siguiente golpe —me dice volviendo a ponerse en posición—. Vamos, ponte en posición y hagamoslo de nuevo, esta vez tu das el primer golpe, ¿entendido?—Sí —digo reincorporándome y poniéndome en posición—. Estoy lista.—Entonces da el primer gol... ¡Wow! —esquiva el golpe que le lance—. Casi lo logras, otra vez —le vuelvo a lanzar un golpe, pero nuevamente vuelve a esquivarlo—. No has logrado tocarme —vuelvo a intentarlo y vuelvo a fallar—. Vamos, sé que puedes.Ambos nos ponemos en posición y Austin se me queda viendo esperando mi siguiente movimiento mientras yo lo veo analizando como poder lograr darle un golpe.Le lanzo una patada y él la esquiva y aprovecho ese tiempo para da