Todo lo que aquí se relata, proviene de la imaginación de mi propio subconsciente; quien me provee la creatividad y el esmero. Sin embargo, tras la sombra de mi materia gris, una Voz diferente, insana, un ente; me dicta dichas oraciones. Podría llamarle locura, pero lo dudo, más bien le llamo: racionalidad alterna.

Esta entidad aprisionando mis dedos derechos, obligóme a plasmar en papel la historia primigenia del infinito y de todo aquello que lo complementa.

Así pues, debo advertir que los nombres de ciertos «personajes» aquí plasmados, no son ni por mínimo algo de mi invención, pues, son viejos y carecen de poder, pues para el profano son desconocidos.

Es como si deseáramos que algo no existiese, pero al mismo tiempo deseamos su existencia y una infinidad de estos espectros son producto de los pensamientos energéticos de todas las especies vivas, son sumamente peligrosos por que no pertenecen a los planos dimensionales de la materia, los cuales perturban la energía natural para contaminarla y alimentarse de la misma.

Sean precavidos y recuerden...

Todo cuanto fue es y cuanto fuese será...

Alan J. Reyes

Introducción

Existirán miles y miles de historias: contadas y por contar, algunas buenas, malas, peculiares, vulgares, profanas, aterradoras, bizarras y más. Logrando con ello que el espectador se sumerja en la vida íntima de sus personajes favoritos. Los harán parte de sí mismos. Argumentarán que sus vivencias serán, en comparación, cómo la de sus héroes. Por ende, darán cabida a fantasías, mitos y leyendas de esa forma de vida, las arraigarán en lo más profundo de su ser, vivirán con una falacia existencial y dentro de una utópica conciencia.

  Será muy fácil persuadir al receptor, haciéndole creer que lo que considera irreal es palpable, material, eterno. Esto no será más que una fórmula, con la cual podrán ocultar la amarga realidad que sucumbirá a sus psiques. No seré un locutor con la intención de introducirme o inspeccionar la conciencia de cada ser racional, pero, permaneceré por el resto de sus vidas susurrándoles a los oídos con aquello que osarán comprender cómo «la verdad»

  Los «Dioses» se han de crear a partir de la soledad de cada cual para no sentirse en su regazo y así poder justificar los actos aberrantes de la homo-especie. 

  Una de tantas razas que subsistirá en los mundos que les corresponderá. No por «intervención divina» ni por «casualidad» sino por la necesidad de la vida.

  No he de lamentar mis palabras, ni las menosprecio. Solo transmito lo que la voz durmiente dicta a vuestros oídos. No deseo despertar en la razón la cordura o demás aptitudes de la sabiduría. Divagaré redactando incoherencias de arcanas providencias y añosos conocimientos para descontento de vuestro propio autor. 

  Os proporcionaré los secretos de la justa razón de la existencia para vuestro deleite, utilizaré vuestra fe para crear títeres de una teocracia eterna, aún más allá en el tiempo después del tiempo…

  No encontrarán, como tal, una guía o filosofía humana que responda las cuestiones «sobrenaturales» o «sobrehumanas» en ningún dictamen, menos hermosas historias de amor con finales felices que, aunque si las llegase a haber, servirán para hacerles comprender que el amor no es más que, un sentimiento vil, corrosivo, decepcionante y destructivo; hasta el grado de parecer una cruel broma. (¡Qué pena para vuestro diseñador!)

  Vida y Muerte, momentos que deben experimentarse a manos llenas cómo agua salada en los océanos. No ha de haber felicidad. Solo persistirá día tras día: angustia, miedo, desesperación, así como infinitos sentires abominables que atormentarán al ser internándole en las catacumbas de su propia ignorancia y la depresión; produciéndole funestos e inagotables malestares. Haciéndome partícipe de cada sorbo envenenado por vuestra raza.

  No mostraré piedad ni misericordia. Eliminaré con ello la compasión. Juzgaré y destruiré la invención de vuestro creador. Hostigaré y hostigaré hasta vaciar las entrañas de cada uno. Beberé cual sediento todos los conocimientos poco cercanos a la sabiduría sobre sí mismos y su extraña existencia. Me conocerán tal cual soy.

  Haciéndolos presas de mis deseos dominaré cada rincón de cada universo como lo he venido haciendo con otros tantos ya desaparecidos desde épocas inmemoriales. Incluso aún más allá en el tiempo antes del tiempo. Tan lejano que sus pequeños cerebros humanos de corta imaginación no podrán comprender. Así mismo, les mostraré una serie de verdades alternas, con lo cual conseguirán sus materialistas ambiciones hasta alejarlos de las verdades de la vida y la existencia en su total forma.

  Se convertirán en seres absurdos llenos de inteligencia hueca, y con este conocimiento formularán teorías que comprueben con nula veracidad la información que se les proporcionara sobre todas y cada una de las civilizaciones que existen en todos y cada uno de los universos dimensionales, desconocerán que los campos científicos para el estudio de las estrellas y constelaciones, son ciencias mortales e inexactas. Una blasfemia.

  La vida es una posibilidad, puede trasladarse, extinguirse y renacer en cualquier sitio. No importa donde, aquí o allá podrá ser encontrada... Siempre.

  Divertiros como infantes, ya que tanto el CLARO cómo el OSCURO, ambos convergen eternamente unificados sin perecer. Porque en donde la luz carece la obscuridad persiste, y así mismo en donde la oscuridad desvanece la luz florece.

  «Parte del texto TRIAGONO encontrado más allá de la ciudad divina de QSHUR la constelación ZARHTASH, (guardianes de la entrada a Kahl-omazhtra)»

Les agradezco infinitamente por la oportunidad que me dan al leer mi trabajo, les aseguro que no se arrepentirán y cada nuevo capítulo estara lleno de diversas emociones y situaciones que harán que vuestra imaginacion vuele. 

Muchas gracias.