"Manuela"
—¿Realmente se tienen que ir? —Le pregunté a mi hermano que acababa de poner la maleta en el carro.
—Tenemos que irnos, Manu, pero vamos a venir más veces a verte. —Mi hermano me abrazó muy fuerte.
—Dile a papá que estoy bien, para que no se preocupe. —Me despedí de mi hermano y de mi cuñada y me quedé viendo el carro alejarse.
—Bajita, estoy preocupado, esa mujer no va a rendirse. No puede entrar al edificio, pero en la universidad no hay forma de impedirlo. —Flávio tenía el brazo en mi cintura, desde el sábado repetía lo mismo y yo sabía que tenía razón, pero no veía cómo evitarlo.
—Sé que no se va a rendir, pero no sé qué hacer. —Hablé mientras caminábamos hacia el carro, volvimos a la rutina de que él me llevara y me recogiera en todos los lugares.
—Deberías hacer una denuncia contra ella y Juliano. —Flávio estaba insistiendo en que fuera a la comisaría y denunciara las agresiones.
—Flávio, ella es mi madre. No es ni por Juliano, él es mi hermano, pero nosotros dos