"Manuela"
El Dr. Molina me miró como si estuviera tratando de encontrar una forma de decirme lo que fuera.
—Ay, anda, tío, habla de una vez, ¿qué tiene de malo? —Melissa parecía ser la propia paciente y era muy gracioso, estaba casi comiéndose las uñas.
—Manu, necesitas estar más tranquila. Esa impaciencia y ansiedad no te van a hacer bien, ni a ti ni a tu bebé. —El Dr. Molina sonrió.
—Ay, Dr. Molina, prometo que cuando ese bebé decida aparecer me voy a calmar, pero hasta que esté embarazada no veo cómo lograr estar tranquila, esta espera es angustiante. —respondí.
—¿Y cómo va a ser durante los poco más de ocho meses de gestación? —preguntó, se estaba divirtiendo con mi expectativa, pero sabía que estaba tratando de calmarme.
—Ay, Dr. Molina, nos preocupamos por eso cuando sea el momento... —Melissa me interrumpió.
—Espera, ¿dijiste poco más de ocho meses? —preguntó Melissa y la miré sin entender qué tenía de malo. Miré de nuevo al Dr. Molina y tenía una gran sonrisa en la cara—