"Manuela"
La casa era hermosa, dos pisos, fachada con pilares de piedra y mucho vidrio, techo colonial y una pintura en un tono beige más oscuro que era precioso. Estaba toda iluminada.
—¿Vamos? —me abrió la puerta del carro. Estaba tan encantada con la casa que ni lo vi salir del carro.
—¿Quién vive aquí? —la casa quedaba en la calle de atrás de la casa de Patricio, por lo tanto, las otras veces que estuve aquí no la había visto.
—No es quién vive, es quién va a vivir, pero eso solo depende de ti —Flavio me sonrió, estaba confundida y pareció haberlo notado—. Dijiste que necesitábamos una casa más grande —se encogió de hombros.
—Sí, una casa más grande, no una casa gigante —no podía quitar los ojos de la casa. No podía ocultar mi encanto.
—¿No quieres ni verla? —pareció medio decepcionado.
—Claro que quiero verla, solo no esperaba esto —sonreí. Esa casa era demasiado hermosa y tenía miedo de que me gustara demasiado.
Pasamos por cada habitación de esa casa y eran muchas. Cuart