Lilly Bradley
Miré la pantalla del celular cuando colgué la llamada con Jackson, mi labio inferior tembló y me di cuenta que un par de lágrimas se habían deslizado por mis mejillas, me llevé mi mano para limpiarlas, tomé aire y lo solté lentamente.
—Respira, Lilly. Respira…—tocaron a mi puerta, intenté reponerme de inmediato para no preocupar a nadie de la casa. —Adelante. —la puerta se abrió y era mi padre. —Hola, pensé que no estabas en casa.
—Estaba descansando, al salir de la habitación escuché tu voz y vine a cerciorarme que estabas y no eran alucinaciones mías. —sonreí a medias.
—Sí, soy yo…—contesté, él arrugó su ceño.
— ¿Qué pasa? ¿Estás llorando? &mdas