Rumores… divertidos, ¿No? son por lejos la mejor manera de superar la monotonía. Pero detrás de ellos hay razones, y consecuencias. Estos no serían la excepción.
Me limité a creer que todo esto lo habían iniciado las chicas de mi clase que me odian profundamente. Y sin preguntarle a Marc, me quede con esa idea. Pero a veces la vida te sorprende.
–Entonces… ¿está bien si me acerco a ti en el instituto? –pregunté una vez la conversación sació y se hacía tarde.
–Por favor. –respondió Marc enseguida, mostrando unos ojos suplicantes que me parecieron adorables.
–¡Marc! –dije, apenas lo v