Un mes después
Una nueva inauguración de hotel, un nuevo viaje, una nueva luna de miel… me encanta el sitio donde nos ha tocado viajar, Paris. La veo sentada en el asiento de primera clase de este avión y solo puedo apreciar lo feliz que se ve.
—No tienes idea lo bonito que se siente verte sonreír de esa manera. — Le comento al oído para evitar que la auxiliar de vuelo que está cerca observándonos nos escuche.
Su sonrisa se hace mucho más notoria, y esta vez es ella quien se acerca a mi oído. —Aunque no me creas, tú eres el responsable de esta sonrisa. — Anuncia de una manera bastante provocativa que solo me hace querer besarla.
Vuelvo a su oído —Creo que eso se debe a lo mucho qu