Aunque desearía estar feliz de encontrarme con Angy, no es así, estoy preocupado, no sé sí querrá arreglar las cosas o tal vez siga molesta y no quiera pasar este día conmigo y solo pidió verme para terminar conmigo.
Cuando llego al lago, veo a Angy de lejos, está sentada a las orillas, descalza, doy un largo suspiro, podría decir que tengo temor de acercarme a ella, intento caminar pero retrocedo en mi intento varias veces, hasta que por fin logro acercarme.
-Hola - saludo con voz ronca, hasta noto un poco de temblor en mis palabras.
Angy da vuelta, me mira y vuelve a mirar al lago.
-Hola Zack - responde con su melodiosa voz y me desarma completo como siempre lo hizo - siéntate.
Me siento a su lado, mientras lo hago decido soltar todo lo que ensayé para justificar esta locura que es mi vuelta a Vietnam.
-Yo...
-... ¡Cállate Zack! -me detiene