Historias

- Antes de comenzar, se que haz notado nuestra sorpresa ante la poca información que tienes de nosotros ¿Estoy en lo correcto?

- Un poco- Le respondo sintiendo mis mejillas calientes-Si te soy honesta no se como pueden ser conocidos de mis padres, y mucho menos como me conocen. Ustedes son muy diferentes. De una buena manera, no me malinterpretes.

- No te preocupes, lo entiendo - Sus labios se curvan, casi como sonriendo- Puede ser una sorpresa para ti pero su padre era el director anterior de la casa y crecimos junto a él. Con respecto a ti, antes de ser adoptada este era tu hogar.

-Vaya- Es lo único que me permito decir, porque no se que más pueda. Es informacion que no esperaba y no se cuanto o como debo sentirme al respecto. Miro mis manos tratando de encontrar que decir y solo encuentro dentro de mi una disculpa despues de ponerme en sus zapatos, pensar en lo que deben haber sentido. - Lo lamento, suena hiriente el que ahora no los recuerde.

- No es tu culpa- Al alzar la vista noto que me observa detenidamente, pero no tratando de analizarme sino de una manera más suave mas tranquila mas cariñosa, y juro que Tamara no necesita las sonrisas de Aristo para transmitir calidez.

Me aclaro la garganta, porque no se como actuar con eso. No me siento como alguien que merezca esa calidez, incluso si la ignorancia no es culpa mía. Opto por cambiar de tema y tratar de romper un poco la tension- ¿Es la casa madre un tipo de orfanato?

Mis palabras tienen el efecto deseado. Ella niega la cabeza de nuevo con sus labios curvados ligeramente - No realmente. Normalmente no es algo que hagamos a menos que sea necesario.

- ¿Entonces cua es el motivo de la casa madre?- Le pregunto confundida.

- Depende un poco de a quien le preguntes. Si soy yo la que responde diría que es proteger, conservar y resguardar tradición. Si vamos a lo práctico es un lugar seguro para personas especiales. - Su voz toma un tono más bajo y serio. En sus ojos la mirada evaluadora regresa, clara y brillante- Para que puedan llegar a ser lo que deben ser.

- Lo haces sonar o como un hospital psiquiátrico o como una secta- Ella se ríe ante mis palabras sin embargo la intensidad de su mirada no disminuye.

- Este lugar es bastante viejo. En su historia encontramos leyendas y cuentos que hablan de él fin de la casa. ¿Quisieras escuchar?

Asiento curiosa. Ella sonríe y comienza a narrar - Se dice que desde hace milenios la casa madre a sido el hogar de cuatro grandes y antiguas familias. La historia cuenta que estas fueron bendecidas con las habilidades de los 4 elementos fundamentales: aire, agua, tierra y fuego, y que fueron designados como "GUARDIANES", quienes protegerian el balance entre nuestro mundo y el oculto llamado Ether. Origibalmente la última casa dotada con el poder del quinto elemento, la mente, cayeron viciados por el poder y decidieron revelarse, romper el vínculo de los 5 elementos y tomar el control del mundo oculto.

《Viendo esto los guardianes de las 4 casas restantes decidieron hacerles frente y derrotarlos para volver a equilibrar la balanza. La batalla fue muy larga y sangrienta, muchas vidas se perdieron, sin embargo la quinta familia fue derrotada y exiliada, jurando regresar para vengarse y volver a tomar control de lo que ellos creían que les pertenecía. Debido a todo esto, los Guardianes decidieron construir este lugar,en donde las futuras generaciones deberían nacer y crecer para proteger el orden natural de lascosas cuando fuera necesario. Es así como desde entonces los "Herederos" son buscados y traídos aquí».

- ¿Eso significa que los otros chicos que viven aquí son "descendientes"?¿Que yo lo soy?- Digo un poco incredula. Ella se demora unos largos segundos, observandome como si la respuesta dependiera de mi, al final decide en responder de manera corta.

- Así es

- Y ¿todos han nacido y crecido aquí a excepción de mí?

-Todos nacieron aquí, pero solo Khala permaneció aquí con nosotros todo el tiempo, Myles regresó pocos años después, los demás si permanecieron por fuera un tiempo considerable. Aunque los mellizos y Dereck hasta el año pasado iban y volvían de vacaciones.

-¿Puedo preguntar el porqué?

Ella niega con la cabeza con una sonrisa de boca cerrada para luego levantarse- Nop, ya te he dicho lo que necesitas saber. Ahora ¿Tienes alguna otra pregunta o estas lista para ese recorrido del que hablamos ayer?

El cambio tan rápido de energía y el giro en la conversación me toma largos segundos en captarlo y procesarlo, pero cuando lo hago simplemente asiento y me levanto siguiéndola.

Las siguientes tres horas las pasamos caminando de allá para acá. Tamara no dejaba de hablar de lo orgullosa que estaba de la remodelacion, y como se había tardado años en terminarla. Si bien, durante el tiempo que estuvimos juntas le hice preguntas, comenté ciertas cosas que me parecian interesantes y bonitas, mi mente todavía seguía sentada en esa biblioteca.

Era como si cada vez que ella paraba de hablar mi mente decidiera volar de regreso a la historia, a la información, a mi padre. Y tanto fue así, que cuando al terminar el recorrido ella me lleva al comedor, no me doy cuenta hasta que estoy sentada esperando a los demás.

- Debo ir a revisar un par de cosas- Me dice Tamara sacándome de mis cavilaciones con una sonrisa de disculpa- ¿Por qué no vas y le haces compañía a Liam?

Ella me hace señas hacia el pelirojo, sentado al otro lado del salon despues de unas puertas dobles de roble que dan a una pequeña estancia con sofas y un amesita de te en el medio. Simplemente asiento y me levanto mientras ella sale por la puerta por la que acabamos de pasar con un "ya vuelvo" de despedida. Voy hasta uno de los sofás libres y me dejo caer en silencio a la espera, era bastante cómodo por lo que no pude evitar recostarme, cerrar los ojos y tratar de descansar.

Me sentia cansada fisica y mentalmente.

Un carraspeo me hace abrir los ojos unos minutos despues - Supongo que te arrastró por toda la casa- Liam me dice, no preguntando, solo afirmando. Apesar de eso afirmo solo por si acaso a lo que el responde con una sonrisa conocedora- Siempre lo hace. Pocas veces tiene la oportunidad de fanfarronear de la casa y menos de la remodelacion.

-"Siempre lo hace"- El alza una ceja confundido ante mis palabras, por lo que me apresuro a explicar - he escuchado un par de veces esa frase hoy y no exactamente debido a Tamara. Aquí de verdad tienen un "ritual" para los nuevos ¿no?

Sus cejas pelirrojas se elevan en sorpresa para luego unirse en una línea de realizacion. Porque si, Liam era un pelirrojo de cejas rectas y ojos castaños, rostro pálido con una barbilla cuadrada y nariz llena de pecas que contrastaba muy bien con sus labios finos, pero era un pelirojo conocedor porque de una vez captó de quienes hablaba- No me digas que lo mellizos...ah, ¿a donde te enviaron?

-Asi que definitivamente un ritual - le digo negando con la cabeza.

El sonríe apenado, rascándose la nuca - Algo así, casi todos tuvimos que pasar por ello y aunque Tamara les llame la atención van a seguir haciéndolo. Son buenas personas pero les gusta mucho jugar bromas pesadas... aunque ya están bien grandes para eso- Lo último lo dice en un tono bajo como para sí mismo.

Como si supieran que estábamos hablando de ellos, los mellizos entran riendo, detrás de ellos Aristo, Tamara y Dereck llenando la habitación de ruido. Liam se levanta y guarda su teléfono en el bolsillo de sus jeans claros, con una inclinacion de cabeza me invita a reunirnos con ellos alrededor de la mesa. Lo sigo y me siento en el mismo lugar de ayer a un costado de Aristo.

- Al final encontró la biblioteca y no le pasó nada, ¿no es así?- Dice Gib. Su tono de voz era de total reproche- No entiendo porque haces de esto un gran problema, solo fue una broma.

-Una de muy mal gusto, y ya les había advertido- Tamara está totalmente seria intercalando su mirada entre ambos gemelos, para luego pasarla hacia un divertido Dereck, quien portaba una sonrisa desvergonzada en sus labios- Y tu, deberías dejar de sonreir porque de esta no te salvas.

El mencionado levanta las manos como si fuera inocente, pero su sonrisa se mantiene en su rostro- Yo no dije nada, ni siquiera estaba ahi.

-En esta- Aristo le llama la atención, en su rostro no había ningún rastro de sus sonrisas pero en su voz tampoco podía apreciar enojo o ira, su tono era de conciliador.

Tanto los mellizos como Dereck rodaron los ojos pero se quedaron callados, Tamara al contrario seguía llamándoles la atención, y Liam y Aristo se limitaron a observar. Por mi parte estaba incómoda, me sentía como cuando vas a la casa de un amigo y sus padres lo regañan.

Obviamente también estaba molesta pero no quería una disculpa de ellos y menos una no sincera, ademas eso no cambiaría el hecho de que no los quería como amigos, su personalidad "juguetona" como todos lo llamaban no va conmigo, y al contrario me molesta mucho, y aunque todos repiten que son buenas personas no esperaré a que me lo prueben o contradigan con sus acciones, simplemente había decidido tratar de no socializar más de la cuenta con ellos.

Para Tamara era una historia diferente y se notaba que no pensaba lo mismo, porque se veía verdaderamente molesta -Veo que no entienden el problema, y como quiero que esto quede entendido esta vez, las consecuencias serán más grandes que una mera disculpa- Ella se voltea haciendo contacto visual con Aristo- ¿No necesitabas ayuda con el jardín?

Victoria trata de detenerla sorprendida pero Aristo responde primero-Claro que si, siempre son bienvenidas nuevas manos- una resplandeciente sonrisa aparece en sus labios.

-Entonces está decidido, desde mañana ayudaran en el jardin - Tamara sentencia como punto final, pero ninguno de los mellizos se vía feliz con ello.

La habitación queda en un silencio tenso,Jane, Khala y Myles entran a la instancia riéndose de algo llamando la atención de todos, al notar la vibra del lugar sus sonrisas se borran.

-Ehh, La comida ya está lista, ¿Deberíamos servir ya?- Dice Myles incómodo.

-Si, creo que todos estamos listos- dice Aristo tranquilamente- ¿Necesitan ayuda?

Ellos niegan alegando que tienen todo bajo control y salen del comedor para volver unos minutos después con distintos platos. Tamara me había explicado que a Jane y a Myles les gustaba cocinar por lo que la mayoría de veces ellos lo hacían, a excepción de fechas especiales donde ella misma preparaba los platos, debido a esto todos los demás se rotaban para limpiar la mesa después de comer, ella me había dejado saltarme hasta el final de la semana pero el lunes tendría mi turno.

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