Un mes había transcurrido desde aquella noche en la playa y la inesperada propuesta de Simón en el hospital. Durante ese tiempo, Hailey y Simón habían empezado a conocerse en un terreno completamente distinto, uno menos formal y más íntimo.
Cada día que pasaban juntos parecía desvanecer los muros que ambos habían construido alrededor de sus emociones. Se encontraban a diario, y cuando las agendas no lo permitían, largas conversaciones por teléfono se encargaban de mantener el vínculo.
Tras su alta del hospital, Simón había decidido dar el siguiente paso: visitar a los padres de Hailey acompañado por los suyos.
**Flashback**
Simón ajustó el nudo de su corbata por tercera vez mientras se observaba en el espejo. Su reflejo le devolvía una mirada ansiosa, aunque intentaba disimularlo.
Estaba nervioso, y no podía evitarlo. Nunca antes había tenido tanto interés en causar una buena impresión.
—Deberías relajarte, hijo —dijo su padre desde el sofá, observándolo con una sonrisa compr