68. Una ceremonia manchada de sangre
La ceremonia iba a celebrarse dentro de un par de horas y Cassio no cabía en su propio cuerpo de la emoción, y es que era como si de pronto un ser superior se hubiese apoderado de a él. Se sentía invencible. Enamorado… increíblemente enamorado.
El lugar que juntos escogieron para la unión civil y la recepción había sido el salón de eventos de uno de los mejores hoteles del país. En un principio les dijeron que la fecha era muy cercana y no había disponibilidades hasta dentro de un par de meses más; sin embargo, Cassio no quería esperar tanto tiempo para estar nuevamente unido a Kathia hasta la eternidad, así que se reunió personalmente con el propietario y su esposa: Emilio y Grecia de Arcuri, y estos se mostraron flexibles ante su petición.
Cassio quería hacer de ese día el más especial para ella, así que la gente que la quería y sabía era importante iba a estar presente.
La hora llegó, y Kathia se miró a sí misma en el reflejo del espejo con ilusión. En el salón de eventos todo esta