Capítulo92
Llegaron al supermercado. Noa había entrado para hacer la compra. Alex no bajó del coche para evitar ser fotografiado por los paparazis.

Después de que se alejó Noa, Alex le dijo al ayudante Fernando, –– Ve a ayudarla.

–– Señor, ¿por qué no va usted mismo, ya que está pidiéndole perdón?

¡Era solamente un ayudante! ¡La ayuda de un ayudante no serviría de nada para mejorar la relación entre los dos!

¡Qué tontería!

–– Miguel, tienes la tendencia de convertirte en un hombre muy hablador. –– Alex le echó una mirada fría.

Sin embargo, Fernando no tenía nada de miedo y respondió con mucha confianza, –– Solo dije la verdad, ¿no? Tiene que mostrar sus esfuerzos por sí mismo ante la señorita.

Al terminar las palabras, Fernando miró al conductor Miguel al sentirse identificado con su opinión.

–– Miguel, también estás de acuerdo conmigo, ¿no? ¡El jefe tiene que mostrarle a la señora cómo se ha esforzado para pedir su perdón!

Miguel se quedó en silencio, solo quería ser un hombre transparente en
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