74. Entre...
Capítulo 74. Entre la verdad y el veneno
El pasillo del hospital olía a desinfectante y a noches en vela. Santiago y Martín caminaban en silencio, con el sonido hueco de sus zapatos contra el piso encerado. El eco se mezclaba con el murmullo de enfermeras y el timbre distante de una máquina que anunciaba el cambio de turno.
Santiago tenía los puños apretados en los bolsillos del abrigo. Ni siquiera se había cambiado la camisa que horas antes había quedado empapada en sudor por cargar a Paula hasta urgencias. Cada paso era una lucha contra sí mismo: entre el deseo de irrumpir en la habitación y abrazarla, y la rabia de no poder protegerla de un enemigo que aún no tenía rostro.
Martín, en cambio, iba más ansioso que abatido. Miraba su celular cada pocos segundos, como si de la pantalla fueran a saltar respuestas milagrosas. Sin embargo, lo único que lograba era sentirse más perdido. A ratos, lanzaba miradas a Santiago, intentando medir su estado de ánimo. El excelente abogado, a pesar d