El departamento de Alexis es... interesante, un lugar completamente oculto entre las montañas, para llegar aquí solo hay una manera, un jodido túnel subterráneo, la entrada oculta entre unos arbustos, es todo tan de película, debo darle el mérito de que este lugar es sumamente enigmático, dejo mi maleta a un lado de una pared oscura de madera y avanzo hasta llegar a un ventanal de piso a techo que deja ver desde lo alto los grandes pinos del bosque.

— ¿No te da miedo que te ataque un oso de repente?.- escucho su risa a lo lejos, me doy vuelta y veo que entra a un espacio que es la cocina.

— Nada ni nadie se acerca a 3 kilómetros de mi casa sin que yo me entere, así que no... no me preocupa eso.

— Bueno señor jefe, estoy listo para que me enseñe como hackear y esas cosas. - Él arruga la frente y se acerca a donde estoy, trae una botella con agua que me tiende.

— Ven conmigo.

Lo sigo por un estrecho pasillo, al llegar a la única puerta del final él abre y se revela un cuarto con vari