Capítulo 24
AXEL
Le tenía una gran sorpresa a Vale, pero no se la iba a poder dar hasta que llegara el fin de semana y así fue. No sé qué motivo me llevó a arreglarme más de lo normal antes de pasar por ella a la escuela en su propio auto, pues mi sorpresa tenía mucho que ver con eso. Llegué cuando ella aún no salía y bajé del auto, me recargué en él y esperé pacientemente hasta que la vi salir y establecimos contacto visual. Ella me miró con mucha ternura y corrió a mi encuentro, nos abrazamos y permanecimos así hasta que ella se separó.
—Hola, Axel ¿a qué se debe esa cara tuya de felicidad?
—Hola, preciosa. Se debe a que hoy tú me vas a llevar de regreso a las cabañas—le di las llaves del auto—veremos si has aprendido bien de tus clases de conducir que te he dado.
—No se puede, no tengo licencia—respondió divertida—no creo que vayas a querer que nos multen.
—No quiero y eso no pasará, ya me he ocupado de todo—le entregué su