Luisa respira de manera agitada, el tiempo se le estaba yendo como agua entre los dedos, aun así, decide enfrentarse a la mujer que tenía frente a ella, inspira de forma profunda y de un momento para otro, toma la flecha que estaba atravesando su hombro para romper la madera con toda la fuerza que tenía en su cuerpo.

Se escuchó su quejido al mismo tiempo que tira hacia la tierra de forma decidida el pedazo de madera que ya no servía para nada.

La morena sonríe, haciendo un acto de burla ante el dolor que atravesaba a Luisa por completo.

— Bueno como ya sabes que soy bruja— declara la rubia— voy a utilizar lo que tenga para defenderme de ti.

En ese momento Luisa trata de lanzar una pequeña bola de magia y maná concentrado en contra de la morena, sin embargo, su sorpresa es enorme al darse cuenta que no sucede nada.

— ¿Qué está pasando? ¿Cómo?— Cuestiona a ella impactada al mismo tiempo que una carcajada sale del pecho de la morena.

Lina quien estaba observando cada uno de los movimi