Capítulo 187.
Oleika se encontraba en medio del mar y el sonido de una maravillosa y atrayente canción comenzó a inundar el lugar.
Todos los brujos y todas las criaturas presentes en el lugar conectadas con la naturaleza comenzaron a acercarse poco a poco al agua… De forma inexplicable esa era la única necesidad dentro de sus cuerpos.
— ¿Qué es?— cuestiona Malcolm, impresionado al sentir que su corazón se hinchaba de amor y volvía a regresar a su tamaño una y otra vez.
Luisa sonríe impactada con lo que está presenciando.
— Había escuchado de ello pero jamás creí poder estar presente, ella está haciendo el canto de las sirenas…
— ¿Realmente existe?— cuestionó Malcolm impresionado.
Luisa asiente, no quería interrumpir la increíble imagen que estaba observando.
— Sí hace cientos de años que no se ha sabido que ese hechizo sea utilizado.
En ese momento, todos guardan silencio Oleika continúa una y otra vez acariciando el agua que la rodea, bailando con la mitad de su cuerpo bajo el agua, respaldando su