Capítulo 185.
Mientras cada uno de los integrantes del aquelarre luchaba con sus propios demonios, Malcolm y Oleika estaban encerrados en la habitación.
Después de tanto tiempo lleno de dolor, problemas e incertidumbre… Estaban juntos.
El ambiente estaba cálido como si estuviera entre ellos el mismísimo sol, sus cuerpos irradiaban una intensidad arrolladora.
— Te extrañé… — Susurró Oleika con una mirada segura y diferente, ya era ella misma por completo, con el conocimiento de todas sus vidas y su existencia desde el principio de los tiempos.
Malcolm en ese instante gruñó, con una vibración y que solo de escucharlo hizo que Oleika se erizara…
El Alfa fuerte y poderoso avanzó conteniendo la desesperación que sentía por poseerla ahí mismo, por volver a tocarla. Comenzó a oler cada parte de su cuerpo, cabello cuello…entre sus pechos.
— Eres deliciosamente adictiva pelirroja…
— Mmmm— Jadeó ella, al mismo tiempo que se mordía el labio inferior y hacía hacia atrás la cabeza disfrutando de cada una de