—¿Qué quieres, Akira? — pregunté nerviosa
—Vamos al estudio—salió sin decir másAún estaba en toalla, así que me vestí y bajé al estudio. Akira juntó sus manos y las llevó a su boca, lucía algo pensativo.—He estado pensando, y sí es cierto que las cosas no están funcionando. Supongo que, si quieres tu libertad y espacio, tengo la mejor opción para eso.—¿A qué te refieres?—No, no hablo de matarte. No pienses tonterías— me miró fijamenteYa veo que puede saber lo que pienso, aunque viniendo de él, no estoy segura si sea cierto.—Entonces, ¿A qué te refieres?—Vamos a mudarnos a otro estado, haremos una vida diferente, uno por su lado y el otro por el otro. Estará