Capítulo 4

—¿Qué rayos te sucede? ¿Por qué razón le has dado esa bofetada? —Norton salió rápidamente de la oficina.

—Porque me ha faltado el respeto, y no quiero que nadie me falte el respeto —respondió Irina con una sonrisa de satisfacción en su rostro.

—¿Pero de qué rayos hablas? Nunca te faltó al respeto, lo vi todo por las cámaras, además las estaba escuchando todo el tiempo.

—Pero mi amorcito…

—¡Amorcito nada! ¡Discúlpate ahora mismo con Kathy!

—¿Por qué le dices Kathy?

—¡Porque sí! Ahora hazme el favor de disculparte con ella, esa será la única forma de que tú y yo no salgamos mal.

—Pero… —Irina quería defenderse y además dejar de un lado el hecho de que le había dado una fuerte bofetada a la pobre de Kathy.

—No me interesa más nada, solo quiero que te disculpes con ella, lo que hiciste no estuvo nada bien, y me está empezando a molestar.

Kathy solo podía observar con una mano en su mejilla, llena de impotencia, no entendía porque esa mujer estaba tan loca, “ella está totalmente loca, no entiendo su forma de actuar, ni siquiera me he acercado a su prometido, y fue él quien me contrató. Menos mal no dije nada de los diez millones”.

—Estoy esperando que te disculpes con ella, no habrá más tiempo y en caso de que no lo hagas te la verás conmigo de inmediato.

—No voy a disculparme —dijo firme Irina, no pensaba ceder ante Norton.

—Pues perfecto, cuando te vayas a disculpar con ella, me avisas y posiblemente nos veamos, así que espero que no me busques hasta ese momento. Tom por favor, llévate lo que falta y lleva a Kathy al auto, pasaremos por las cosas en su oficina y además quiero que tengas todo preparado para lo que te comente más temprano, si es posible nos vamos hoy.

—Perfecto señor, creo que estamos en un buen momento para hacerlo, enseguida terminaré de planear el viaje.

Así Tom salió de la oficina junto con Kathy sacando las pocas cajas que quedaban, como Kathy no había tenido tiempo de devolverle las llaves del auto era ella quien las tenía. Llegaron al estacionamiento y así guardaron las cosas restantes.

****Mientras tanto en la oficina****

—Lo que hiciste fue algo muy absurdo, no es posible que la pongas a ella por encima de mí —Irina reclamó molesta. Norton solo cruzó los brazos frente a ella.

—Mira, eres una niñita mimada de papi y mami, quiero que por favor caigas en cuenta que el mundo no gira solo alrededor de ti, hay muchas otras cosas que son importantes, entre las que se encuentran las personas que te rodean, no eres el centro del mundo o del universo como tus padres te han hecho creer.

—Amorcito… ¿Por qué me dices todas estas cosas?

—Porque estoy cansado de que trates a todo el mundo como si fuera inferior a ti, además de que el espectáculo que montaste frente a mis empleados no tiene justificación. No entiendo la razón por la cual le has dado una bofetada a Kathy.

—Porque ella se burló de mí.

—Nadie se ha burlado de ti niña tonta —le terminó de decir Norton mientras que entraba en su oficina, tomaba las pocas cosas que le quedaban y salía en dirección al ascensor.

—Mi amorcito, no te pongas así. Te prometo que voy a cambiar.

—Ya he escuchado eso muchas veces, y estoy cansado de que lo digas, mejor dejemos todo hasta acá.

—Mi amorcito, no podemos hacer eso, recuerda que nuestra relación es arreglada, nuestros padres pueden tomar una decisión muy agresiva y si rompes conmigo mi padre te matará…

—Correré el riesgo —fue la respuesta de Norton mientras que se montaba en el ascensor, Irina intentó entrar pero con la ayuda de una de las cajas Norton se lo impidió sin lastimarla, así ella solo se quedó mirándolo mientras que el ascensor terminaba de cerrarse.

Norton bajó hasta el sótano. Allí fue hasta su carro y allí estaban Tom y Kathy esperándole.

—Lo siento mucho Kathy, por favor disculpa que haya sucedido todo de esta manera.

—No se preocupe señor, al final lo que sucedió no fue culpa suya… aunque quisiera que me dijera la razón por la cual me ha contratado y por 10 millones de dólares, esa suma es una locura —Kathy puso fin a la agonía de saber que era lo que pasaba por la mente de su nuevo jefe y directamente le preguntó.

—Solo te contrate porque eres eficiente, además de que cuando Thompson se entere de que fuiste tú quien me entregó el sobre con las pruebas querrá matarte, así que para poder protegerte te saque de allí, y además para que no perdieras tu trabajo te traje conmigo —Norton respondió mientras que se sentaba de copiloto, obviamente era Tom quien conducía generalmente el auto.

—Muchas gracias —respondió Kathy de forma tímida.

“Soy una tonta, pensé que le gustaba al Sr. Bays, pero en realidad él solo se preocupaba por mí y por mi seguridad, es un muy buen hombre…”

—Además de que eres una chica muy hermosa. Jejejeje —añadió Norton, ella solo alzó la mirada para verlo por el retrovisor, entonces Norton le indicó a Tom que manejara.

—Señor, vamos a ir primero para la oficina del Sr. Thompson —afirmó Tom para que Kathy escuchara y estuviera atenta para que luego de que llegaran ella pudiera recoger sus cosas lo más rápido posible.

—Bien, Kathy espero estés lista, recoge todas tus cosas lo más rápido posible y no le digas nada a nadie, seguro tu jefe ya ha llegado y ha hecho que recojan tus cosas.

Pero, solo al girar en dirección a la empresa había un cartel escrito rápidamente que decía: “No hay necesidad de que entres en mi empresa, allí dejo todas tus cosas”.

—Esto es humillante, al menos debió de haber dejado que fueras a buscar tus cosas —dijo Tom.

—Seguramente se ha enterado de que has sido tú quien ha logrado llevarme los documentos, sé la razón por la cual Whipton me ha enviado los documentos contigo, esto haría molestar aún más a nuestro querido amigo Thompson, por esa razón todas las cosas de la señorita Wilson están en la calle —luego la miró a ella—. Te lo dije, Thompson es un hombre que no tolera un error, y sé que lo que sucedió no fue culpa tuya, por esa razón quiero protegerte.

—Ya veo… —Kathy solo pudo decir esas palabras mientras que seguía observando que sus cosas estaban solo en la calle, cualquier se las pudo haber llevado, su computadora, todo el equipo de trabajo estaba allí en plena calle. El auto se estacionó frente a los objetos.

Kathy se bajó y empezó a recoger cada una de sus cosas, cuando de repente varios autos negros llegaron hasta el auto de Norton y unos hombres de un aspecto muy rudo se bajaron.

—Te has metido con la familia equivocada, hiciste llorar a la Srta. Petrov, su padre quiere que lo pague con su sangre, pero quiere verle el mismo personalmente.

—A… —Norton iba a replicar, pero no le dieron tiempo, enseguida un golpe le fue propinado en su rostro, quedó desmayado, a él y a Tom los sacaron del auto y los llevaron arrastrados hasta una de las camionetas, al girar Kathy observó la escena, era todo un caos, pero a ella no la vieron y los hombres enseguida arrancaron sus vehículos.

“Pero ¿Qué pasa con el día de hoy? Ha sido una locura total, ahora secuestraron a mi jefe, ya esto es suficiente. Voy a llamar a mi padre”, pensó Kathy y así sacó su móvil de su bolsillo, buscó en su lista de contactos y llamó…

—Hola hija, que sorpresa ¿Cómo te va en la gran ciudad?

—Papi necesito que me hagas un favor, las cosas no están muy bien. ¿Podrías ayudarme?

—Tu padre es el presidente de este país, no hay nada que no pueda hacer por su hija.