Nathan
Ahora estaba avergonzado por estar en la mafia. Bueno, desde hace tiempo lo estoy, pero que ella, mi propia madre dijese el miedo que sentía cuando quería volver a verme en el pasado, luego de irse, me hacía sentir muy culpable. Y lo era. Me avergonzaba por mis actos irresponsables y descuidados, por el dolor que le causé a las personas por una simple adicción a la adrenalina.
Me quedé sin palabras, atento a los movimientos sutiles y nerviosos de mi madre; a los movimientos de Derek, incluso a los movimientos de Marco, quien recién se enteraba de la situación. Todo estaba tenso. La tensión nos envolvía a los cuatro y nos removíamos inquietos ante el momento. Busqué palabras para excusarme, para defenderme, pero ni mi orgullo podía vencer esto, pues ninguna palabra que dijera, iba a ser buena para quedar como el bueno de la película. Me imaginé