Narra Kim
Me había asustado. Todo había pasado tan rápido que cuando Lu frenó por la impresión, al segundo siguiente estábamos rodeada de cámaras y preguntas dichas a gritos para ser escuchadas por encima del ruido. Todo era tan extraño y nuevo para mí, que como en el restaurante, quedé estupefacta mientras Lu intentaba cubrirme.
‘Menos mal no te vieron con aquel diminuto vestido’ me dice mi mente intentando tranquilizarme, pero no lo hace.
Rayos, si saben dónde vivo, no me sorprende que me hayan seguido desde el restaurante…
— Realmente me preocupa que estés tan callada y fría. ¿Realmente te encuentras bien? — pregunta Alessandro y yo lo miro intentando que ello le dé tranquilidad. Sin embargo, me ruborizo al ver una marca roja en su cuello que tiene ciertas partes moradas.
‘Vaya, también lo marqué’ me digo mentalmente avergonzada.
— Por lo menos, ahora te veo roja. Es mejor a estar blanca como un papel. — murmura Alessandro y yo desvío mi mirada avergonzada.
— ¿Cómo supiste es