—No hay más trabajo para ti hoy. Solo descansa, y cuando te sientas bien, puedes irte a casa. Podrás reanudar el trabajo correctamente mañana —dijo Dereck con tono firme.
Paola sabía que no tenía sentido discutir con él, ya que parecía decidido a no dejarla trabajar más por hoy.
—Está bien, gracias