Perspectiva de Sebastián
Ella ya no me ama. Me cuesta creerlo, pero es la verdad.
No debería sentirme así, pero siento que perdí algo muy preciado para mí. ¿Cómo es posible sentir dolor por perder algo que nunca quise? ¿Dónde está la justicia? Ella me obligó a aceptar su amor y ahora me lo quita igual. Nunca pude decidir por mí mismo.
Nunca entendí lo que era querer algo que no puedes tener, hasta ahora.
No supe apreciar lo que tenía, hasta que lo perdí. Todo se fue tan rápido... Su amor era como el suelo bajo mis pies, firme. Y de repente... ¡puf! Desapareció. ¿Cómo alguien corta el amor de raíz así de fácil?
Ella no solo cuidaba nuestra casa, sino que hacía parecer un hogar. Cuando volvía a casa, siempre estaba ahí, sonriendo, con ropa sexy, cocinando. Era mi refugio, un lugar para olvidarme de los problemas y donde recargar energías. Lo hizo tan seguro que nunca imaginé que podría acabarse.
¿Cómo pudo simplemente... marcharse?
Ni siquiera sé en qué fallé. Sé que la traté mal,