~Damian~
—Es bastante extraño verte sin tu querida mascotita —me dijo Oliver mientras yo ya me moría del aburrimiento en su fiesta. Bueno, "fiesta" entre comillas. Era solo un club donde se reunían a pasar el rato los actores y él había invitado a unos cuantos más, estaban jugando "verdad o reto". A veces tomo algo con él, pero en plan tranqui, no esta clase de show.
—No estaría aquí si no me hubieras obligado, así que gracias por eso —le respondí, poniendo los ojos en blanco mientras apoyaba mis brazos y mi cuello en el respaldo del sofá, tratando de aliviar la tensión. Oliver le decía a Lilith mi "sombra" porque últimamente había estado trabajando horas extras, cosa que no suelo hacer, solo lo hice para pasar tiempo con ella.
Nunca me gustó la regla de mentor-aprendiz en los bufets de abogados, pero cuando ella llegó, no pude evitar ahuyentar a todos los socios que la miraban con deseo.
Nunca pensé que yo querría ser mentor de alguien.
Pero ¿cómo no hacerlo? Era perfecta. Lilith era