El día de la boda, mi madre me despertó antes del amanecer para que me arreglara. Salvatore pasó por mí en persona para llevarme a la iglesia en el carro de bodas.
Durante el trayecto, no pude evitar mirarlo de reojo. Era el polo opuesto de Giovanni. Giovanni era un mujeriego con aires de patán, pero Salvatore tenía la elegancia distante de un caballero.
Llegué a pensar que era indiferente y cruel, hasta que se convirtió en un demonio vengador por mí. Solo de recordarlo, sentí mucha ternura.
La misma iglesia, el mismo camino… pero mis sentimientos no podían ser más distintos. En mi vida anterior, estaba ansiosa, aterrada de que Giovanni se arrepintiera y me dejara plantada en el altar.
Pero en esta vida, sentía una calma y una seguridad que nunca antes había conocido.
De pronto, una camioneta blindada se nos cruzó en el camino y obligó al carro a detenerse. No podía creerlo. Era Giovanni. Se había vestido de novio, con un traje negro.
Mi semblante se transformó. No podía creer que, a e