Un mes después

Ya no puedo seguir caminando más, siento que estoy en una especie de laberinto interminable como las palabras. Por lo que, más son las veces que nos detenemos a descansar que el tiempo en el que avanzamos.

El conteo de cuantos hombres lobos quedan solo ha bajado un poco, ha pasado todo un mes y no nos hemos encontrado con un solo hombre lobo, por lo que, eso explica porque solo han muerto tres lobos en total en todo este tiempo.

— No sé si moriré del cansancio, el aburrimiento o el agotamiento, pero, sin duda, puedo sentir la muerte cerca. Estoy muriéndome. — digo mientras me tira en el suelo.

— Querida, debemos seguir en movimiento. — dice Lucifer que saca energía de no sé de dónde.

— No puedo, realmente no puedo hacerlo. — respondo sintiendo que en cualquier momento voy a morir.

Sin importar que nos encuentren, básicamente me entier