—Es suficiente. Por ahora descansa. Te llevaré a la rueda de prensa más tarde — respondió Belén antes de asentir.
A continuación, le indicó al médico que le pusiera un goteo que le repondría la energía, y les recordó a los otros médicos que prepararon una silla de ruedas para el paciente.
Una vez que terminó, dio una patada al interruptor que controlaba la puerta de la sala de emergencia y salió.
Los ojos del paciente se dirigieron inconscientemente hacia Belén. Ella parecía brillar con cada paso que daba. Parecía que era capaz de arrastrar a la gente, y ante eso, el muchacho apartó la mirada.
El médico de guardia comenzó a explicarle sobre el marcapaso que tenía en su cuerpo y le recordó:
—A partir de ahora no debes revisar ningún deporte extremo. Recuerda revisar el estado del marcapaso al menos una vez al año.
—Entiendo. —El paciente cerró los ojos con remordimiento.
Antes, su hermano le había dicho que solo iba a tener síntomas de alergia durante poco tiempo cuando el vene