Las palabras de Santiago hicieron que Alicia palideciera de miedo mientras el corazón le latía con fuerza.
«¿Habrá descubierto lo que hay entre Álvaro y yo? ¿Sospechará que el niño no es suyo?».
Enseguida, comenzaron a sudarle las manos y se convenció a sí misma de que él solo quería saber cuánto tiempo tenía el bebé. Miró nerviosa al doctor, que respondió:
— Está de tres o cuatro meses.
—De tres o cuatro meses —replicó Santiago.
¿Una mirada de alivio se reflejó en su rostro y al fin se permitió sonreír de alegría?
«Hace tres o cuatro meses atrás, Álvaro supervisaba la sucursal de Alicia en el extranjero. Teníamos sexo al menos una vez a la semana en ese entonces, lo que significa que el bebé es mío».
Como el doctor quería ayudar a Belén, propuso:
— Si desea saber la fecha exacta, podemos realizar un chequeo completo de forma gratuita.
Alicia se negó de inmediato:
—No es necesario, lo haré en otro hospital. Gracias de todos modos.
Dado que insistía, el doctor tuvo que ced