Desperté en mi cama, sentí que mi cabeza explotaría en cualquier momento pero con dificultad puse mis dos pies en el piso tambaleándome, salí con pasos cortos y desordenados hasta llegar a la puerta donde me encontré varias personas en una clase de reunión, pude reconocer a Lucas, a el viejo y Miriam frunciendo el seño. No deberías ser tan tonta para no darte cuenta que el ambiente era muy pesado, la aura se sentía tan frustrada y dolorosa que hizo que mi cabeza de vueltas en su lugar.
- ¿A qué se debe su visita, ya tomaron el té? - Dije débilmente. Entrando en la escena.
- Elizabeth! - dijo Ralf casi creyendo que no estaba frente a sus ojos.
- Elizabeth. ¿Estas bien cariño? ¿Te duele algo? - Rápidamente vino Miriam a abrazarme, Me apachurro mucho y sentí varias lágrimas mojando mi vestido, me sentí un poco extrañada..
- ¿Cuánto tiempo me quedé dormida?- Dubitativa pregunte sabiendo que la respuesta sería bastante dolorosa. ¿Que rayos me