Punto de Vista de Luis

Abrí los brazos de par en par.

—¿Qué crees?

Dio otro paso hacia atrás, sus ojos se movieron a izquierda y derecha, calculando. Claramente estaba buscando una vía de escape.

Sonreí.

—Adelante. Corre.

Su mandíbula se apretó. Estaba sopesando sus opciones, decidiendo si luchar o huir. Pero cometió un error... pensó que tenía elección.

Me moví antes de que pudiera siquiera parpadear.

Aterricé un golpe sordo en su mandíbula, enviándolo a tropezar hacia atrás. Escupió sangre al suelo, la ira lo superó.

—¿Crees que puedes enfrentarte a mí? —gruñó, moviendo los hombros—. ¿Crees que solo porque de repente estás curado, eres más fuerte que yo?

¿Fue eso un desafío? ¡¿Este hombre marica estaba desafiando al grande y magnífico Papi Luis?!

Me reí con frialdad.

—Oh, Ernesto. No creo. Lo sé.

Con eso, se abalanzó sobre mí.

Más rápido de lo que esperaba. Más fuerte que la mayoría. Pero no lo suficientemente fuerte.

Moví los dedos y dejé que mi poder se aferrara a él como un agarr