Capítulo 26.
Evelyn.
—¿Hay alguna persona que considere tendría interés en comprometer su seguridad, Duquesa? —preguntó el Supervisor, sin sonrisa o método amable.
Su voz se vuelve neutral, mientras sus ojos me escanean con disimulo. Sé lo que está haciendo.
—No —contesto, y es verdad. Asiente una sola vez y mira la escultura de cristal detrás de mí, para luego clavarme los ojos de nuevo.
—¿Ha recibido mensajes cifrados, contactos indirectos o interferencias en sus dispositivos personales?
—No— muevo mis dedos, frotándolos un poco, mientras sigo con el ceño fruncido y la mirada cambiando de él a Corbin.
—Tal vez se pregunte por qué hago esas preguntas— observa al Duque—. Hubo una fuga de información, que es seguro que recuerda.
Asiento en reiteradas ocasiones.
—Quise asegurar por mí mismo que estuviera al tanto de los riesgos por no presentarse a apoyar con la investigación— siento como estudia cada gesto y le doy los necesarios. —Aunque es comprensible que necesite adaptarse al cambio d