LADRIDOS DE LA NOCHE

A mis amigos: Héctor, Alvaro y Ángel.

En especia a: Luis Eduardo Vazquez Cuellar.

He sido siempre una persona introvertida. No conocí la verdadera lealtad de la amistad hasta que llegaron los primeros indicios de la pubertad y los términos de la adolescencia. Durante todo ese tiempo había sido siempre una persona absolutamente normal, común y corriente, sin nada extraordinario que contar. Tenía a mis amigos, una familia y decenas de proyectos de vida y como todo mundo, mis intereses ocultos. Sin embargo, cargaba con pequeñas variantes en mi comportamiento que me hacían un poco menos normal igual a los demás; por poner un ejemplo diré que no me avergonzaba el carecer de novia ni de haber besado todavía a una mujer por carácter de valor para dirigirme a ellas, o a la falta de algún interés específico que pudiera compartir. No necesitaba de narcóticos, hierbas o alcohol para disfrutar de la música y la gente que se congrega en el baile y las luces de los centros nocturn

Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
capítulo anteriorpróximo capítulo

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App