Aura
Luka sigue en posición de ataque mientras Iktan entra a casa y cierra la puerta a pesar de la amenaza de su hermano.
—¿Ahora rescatas lobos salvajes?
—¡No es solo un lobo Iktan!
—¿Por qué te pones en riesgo Aura? ¿¡Acaso quieres morir!?
—¡No! No intento morir, quería salvarte.
—¿A mí?
Luka lanza una advertencia clara en contra de Iktan y se acerca hasta mi. Se pone justo entre él y yo y lo único que se me ocurre es acariciar su cabeza y tranquilizarlo.
Me pongo de rodillas junto a él y acerco mi mano con cuidado.
—Oye, mírame, él no es peligroso. Es Iktan, ¿Lo recuerdas? Es tu hermano.
Tanto Luka como Iktan se sorprenden por mis palabras supongo, hay algo en Luka que lo bloquea, necesito averiguar qué es.
Luka se recuesta junto a mí y descansa su cabeza en mis piernas. Yo respiro tranquilizando de nuevo la respiración. Luka debe estar cansado después de todo lo que tuvimos que pasar.
—¿Cómo hiciste eso? –cuestiona Iktan quitándose el saco–, ¿Cómo carajos hiciste eso?