Mundo ficciónIniciar sesiónBenjamim entró en la casa sin saber exactamente adónde debía ir. Sus sentimientos revueltos se reflejaban en sus pasos. Se sentía completamente perdido. Escuchó la voz de Adam, que venía del fondo de la casa, y atravesó el largo pasillo hasta encontrarlo en un cuarto en compañía de Dominique y Carmélia.
Las mujeres se levantaron asustadas, como si él fuera un enemigo que necesitaba ser combatido. Benjamim odió la manera en que ellas lo miraron. Todos ya sabían de la decisión del juez porque Antonela se lo había contado y ahora él había pasado a ser el villano de su propia historia.
Fue el abrazo cariñoso que Adam le dio lo que rompió toda la tensión que había en el ambiente. El chico era el único que parecía feliz con su presencia. Si Adam supiera los motivos que lo llevaron allí, si él pudiera co







