Capítulo 972
Gabriela se dio cuenta: —¡Fue Gemio quien te hizo esto!

Tiene sentido, aparte de un niño, ¿quién más podría ser tan ocioso?

—¡Desátame rápido! —instó Alfredo.

Gabriela dijo: —Jura que no irás a buscar a Aurora, y te desataré.

—Lo juro.

Gabriela le estaba deshaciendo las trenzas.

Mientras esperaba su juramento.

Pero él solo dijo lo juro y no continuó.

Gabriela estaba sin palabras.

—¿Dónde está tu juramento?

Alfredo la miró: —¿No lo hice ya?

Gabriela se quedó sin palabras.

Se levantó.

—¡Entonces quédate atado!

Alfredo con resignación: —Las mujeres son tan complicadas.

—Aurora también es una mujer, ¿por qué te gusta ella entonces? —contraatacó Gabriela.

Alfredo se quedó sin palabras.

Frunció el ceño: —Me rindo, me rindo, realmente no puedo ganarte. Juro que si voy a buscar a Aurora, entonces…

Gabriela lo miraba.

—¿Entonces qué?

Alfredo se retorció la boca: —Que la comida me queme la boca y el agua me ahogue la garganta…

—¿Qué clase de juramento es ese? ¿No puedes hacer uno más directo?

Al
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