CAPÍTULO 137. Reunión familiar.
Capítulo 137
Reunión familiar.
El portón de hierro se abrió con un crujido suave cuando Leonard y Alessia llegaron al departamento. La luz dorada del ocaso se filtraba por el vestíbulo, proyectando sombras alargadas sobre el mármol pulido. Él sostenía la mano de ella con firmeza, como si temiera que el momento se desvaneciera antes de llegar a su destino.
—Ya casi estamos —susurró Leonard, apretando su mano—. ¿Lista?
—Más que nunca —respondió Alessia, dibujando una sonrisa que iluminó sus ojos—. Vamos.
Ascendieron por la escalera de caracol que conducía al piso principal. El aire olía a cera de abedul y a un leve toque de lavanda, recuerdo de la limpieza que había hecho Nadia esa misma mañana.
Cuando Alessia introdujo la llave en la cerradura, sintió un pequeño cosquilleo en el estómago, mezcla de anticipación y nervios.
Al abrir la puerta, fueron recibidos por un golpe de calor y un murmullo familiar. Nadia, la nana, apareció al instante, dejando a un lado el trapeador y el balde de