13. Capítulo
Ese mismo día, la muchacha se arregló para ir a trabajar. Le pidió al cielo que su jefe no fuera un ogro gruñón y que no estuviera de mal humor para entender su retraso, aunque a veces este no entendía a nadie y gruñía sin parar.

Se puso su mejor ropa, se peinó el cabello y se colocó un poco de maquillaje. No era tan asidua a él, pero se notaba tan pálida y demacrada que necesitaba la ayuda de algunos cosméticos para hacer un milagro con su rostro y verse bonita. Y sí, lo logró.

Sin perder más tiempo, se puso en marcha hacia el trabajo. Ya eran casi las 12 del mediodía según su reloj en la muñeca, aunque lo pudo comprobar con la hora de su teléfono. Así logró confirmar que sí era esa hora, aunque el clima en la ciudad de Nueva York lo hiciera ver diferente. Por un momento pensó que era más temprano, cuán equivocada estaba.

Gracias al dinero del padre de su amiga, pudo pagar un taxi hacia la cafetería donde trabajaba, su nuevo trabajo.

La primera en recibirla con un caluroso abrazo
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo