Narrador:
Con mucha dificultad y con la ayuda de Luka, Alicia fue recuperando fuerza y con ella su movilidad.
‒ Haz estado muy callada hoy, Alicia, ¿te sucede algo?
Le preguntó Luka, ya que ella parecía distraída y poco comunicativa
‒ No es nada importante, descuida
‒ Todo lo tuyo para mi es importante – le acarició la mejilla y ella entonó sus ojos, a lo que Luka le sonrió, pues era un gran avance
‒ No sé cómo decírtelo…
‒ Diciéndolo, como siempre lo has hecho
Alicia se acomodó en la cama y tragó saliva
‒ Tengo una inquietud, pero no sé cómo preguntarle al doctor, pero tal vez tu sí lo sepas
‒ ¿De qué se trata? – Luka se acercó y tomó su mano - ¿Tan grave es? – ella no le respondía, solo lo miraba fijamente y sus ojos se llenaron de lágrimas - ¡Por Dios, Alicia!, estás logrando que me asuste y mucho – le acarició el cabello – por favor, dime que es lo que te inquieta tanto – y aguardó
‒ Es que… - volvió a tragar saliva – por lo que me contaron, estuve dos semanas secues*trada
‒ Eso e