CAPÍTULO 11. El inicio de sus manipulaciones.
Capítulo 11
El inicio de sus manipulaciones.
En la mansión Martínez, Valeria se encontraba recostada en su cama, con sus sábanas color rosa perfectamente dispuestas sobre su cuerpo delgado y su piel aún pálida.
Adrián entró sin anunciarse. Vestía un abrigo gris oscuro y una expresión hermética. Se acercó a la cama con pasos contenidos.
—¿Cómo estás hoy? —preguntó, con su voz cálida y gentil. Como siempre solía ser solo con su hija preferida.
Valeria suspiró, con los labios temblorosos. Sabía lo que debía hacer para cumplir sus propósitos.
—Mejor... supongo. Aunque me cuesta dormir —murmuró—. El cuerpo recuerda papá... incluso si el alma intenta olvidar.
Adrián frunció el ceño con gravedad. Se sentó junto a ella, le tomó la mano.
—Los médicos dicen que fue un aborto espontáneo, hija. Que no hubo trauma físico aparente. Sé lo fuerte que eres, vas a superarlo.
—¿Y las emociones no cuentan? ¿El estrés, el miedo? ¿Crees que eso no lastima igual, papá?
Él bajó la mirada.
—No quise decir es