Noah.-
Nunca había estado tan incómodo en mi vida, observo a Emma alejarse y siento que puedo respirar, no sé qué tanta tolerancia podré tener a su lado, porque mis emociones son un desastre la odio por lo que le hizo a mi hermano, pero cuando me sonríe solo quiero besarla y hacerle el amor sin ningún remordimiento.
Emma es un huracán que me está llevando al límite, de un extremo a otro y no tengo ni idea de cómo contener todo ese remolino de emociones que me está haciendo sentir.
— Hola guapo
Veo a Ella sonriéndome de manera coqueta, caminando hacia mí con seducción, pasa sus manos por mi pecho.
— Es una pena, elegiste quedarte con la hermana mala –Chasquea sus dientes mientras niega con su cabeza.
— ¿Por qué decidiste decirle que nos conocíamos ahora y no antes?
— Por diversión, quería ver la cara de ambos cuando lo dijera, Emma siempre gana esta vez quería ser yo la que le gane una
Ella intentó acercarse a mis labios, esta sería una venganza perfecta para Emma verme con su hermana,