CAPITULO EXTRA 04
La vídeollamada se terminó, y alcancé el móvil, deslicé el dedo la pantalla y de inmediato le contesté a maximiliano.
—Amor, ¿Que ocurre?
—Hola cariño, llamo para avisarte que no voy a llegar para cenar. Estaría allá aproximadamente a las 12 de la noche porque se me ha presentado un inconveniente con un inversionista.
—¿Pero por qué tan tarde fuera?
—La verdad necesito hacer un viaje corto a varios kilómetros de aquí y no creo que llegue temprano a casa, por eso te aviso de antemano para que no te preocupes por mí. Pero estaré de vuelta a las 12:00. Te amo.
—Bueno, así me quedo más tranquila. Gracias por avisar y cualquier cosa que suceda no dudes en contactarme. También te amo cariño.
La llamada que ha durado tan poco, finaliza, y vuelvo a dejar el móvil sobre la cama. Suspiro profundo. Es raro cuando Maximiliano tiene que llegar a casa a esa hora. Pero confío en él y sé que verdaderamente me dice algo cierto y no me está mintiendo.
Al anochecer preparo la ce