El tiempo fue pasando para todos, tras los acontecimientos que a cada uno le tocó vivir, aprendieron de sus errores y ahora tienen metas diferentes.
Daniel tiene poco más de dos años, es un niño sano, lleno de energía, curioso y muy inteligente, porque tiene la clara idea de cómo manipular a los tres hombres que se desviven por cumplirá cada capricho.
Para Keylen es una batalla diaria, tratar de poner límites, porque entre Steven, Jake y Díaz se los tumban en menos de un segundo.
Precisamente, en ese momento, entra a la cocina y se encuentra un enorme desastre de cereal, leche y jugo.
-Es que me van a oír – sale de la cocina, con toda la postura de asesina y cuando llega a la sala, apaga la televisión, se para frente a Jake y Daniel, para dedicarles la mirada que solo intimada al hombre -. ¿Qué se supone que pasó en la cocina?
-Daniel quiso prepa