Capítulo 25
Me robó el corazón
Eliana
Luego de este incómodo momento, siento que Fabio pudo darse cuenta que quedé con ganas de darle un beso y me aterra pensar que sea así, porque ese hombre no dudaría un segundo en burlarse de mí, así que me alejé de él y traté de disimular un poco esta situación.
Quise hacer de cuantas como si nada pasó, pero Fabio no es ningún tonto, el puede darse cuenta de todo y me sorprende que no me haya salido con uno de sus chistesitos ácidos.
—¿Qué sucede? ¿No estás satisfecha? —se burla y es justo donde se viene abajo todo lo que pensé antes—. Si gustas puedo hacerme el distraído para que me beses a tu antojo. No es cosa que acostumbro a hacer a diario, no me malinterpretes, pero por ti me sacrifico.
—No empieces con tus bromas de mal gusto —viro mis ojos y él me abraza por la espalda—.
Todo esto es nuevo para mí, creí amar ciegamente a Juan David, pero está sensación que me trasmite Fabio nunca antes la sentí por Juan.
—Vamos, miraré a otro lado y fing