Al entrar una bella canción resuena en el lugar, no tiene letra pero se escucha tan hermosa como misteriosa.
—Bien, yo iré a terminar unas quehaceres y tu..
—Te ayudaré— digo —. No voy a estar aquí sin hacer nada.
—Mmmmm, Bueno, entonces limpia los muebles de madera con este líquido— me da un trapo y un liquido naranja —. Por favor con cuidado Eco.
Asiento. Se va por un pasillo hasta que dejo de escuchar sus pasos.
La canción resuena aún más, como instandome a buscarla. Suena tan hermosa pero tiene algo que es difícil de describir.
Limpio una estatua de una dama tallada en madera y luego otra y otra, avanzo cada vez a donde proviene la canción.
<
>— pienso.Sigo la canción que proviene detras de una puerta. Medito si entrar, no quiero ser inrespetuosa, pero la curiosidad me gana.Abro la puerta y lo que veo me deja sin habla.—Woa.....Hay libros por doquier, podría jurar que hay MILLONES DE LIBROS. Parece un biblioteca, los estantes l