Isabella se entera de la pelea...
La embarazada estaba dolida, decir que no había sentido nada por las crueles palabras que les dijeron a sus hijos, sería mentir.
— ¡Por supuesto que papá lo puso en su lugar, mamá, Le advirtió a ese hombre que se retractara de sus palabras o le daría la paliza de su vida! — Alexandrito le daba los pormenores a su madre.
— Sergey, tú... Defendiste a nuestros hijos y mi honor, ¿Cierto...?
— Claro que sí, no iba a dejar ir a ese miserable que se atrevió a atacar a mi familia delante mío, le dije que le daría la paliza de su vida y se lo cumplí! Ahora te aseguro que nadie se va a atrever a llamar bastardos a mis hijos.
Afirmó con seriedad el ruso. Había disfrutado de hacer tragarse sus palabras a Ontiveros, y de haberlo hecho gritar de dolor.
— Déjame verte Sergey, ¿Creés que no me he dado cuenta de que me estás evitando? Ven aquí.
El CEO no tuvo más opción que darse la vuelta y mostrarse a su mujer.
— Isabella se sorprendió al verlo tan golpeado, tenía el labio roto, l