EL DOCTOR EVANS.
-Karolina, no sé cómo estás, me gustaría saber de ti, ya tu embarazo debe de estar avanzado, vendrás a tener a tu hijo a este país o nacerá allá en América, sabes que cuentas conmigo, me gustaría ser tu medico y el de tu hijo, dime donde estás e iré de inmediato, te he pensado mucho, desde que falleció Arthur, no supe nada mas de ti, acá todo es triste sin ti, te quiero mucho, envíame tu número telefónico y tu dirección. Este mensaje encontró Karolina en su correo electrónico, como el hombre había conseguido aquel correo ella no lo sabía, pero estaba segura de que no deseaba tener a Evans cerca de su hijo, él hombre había cometido una indiscreción y era dejar ver que tenía contacto y hasta una amistad con Marla Johannes, ella no le hizo ver a Evans que se había dado cuenta, pero se alejó de él inmediatamente.
-Hola doctor, le cuento que, de tanta depresión por la perdida de Arthur, mi hijo ya no va a nacer, así que no se preocupe por mí, respondió ella sin más, tenía que proteger a su