C99-LA DIOSA TE GUÍA.

Todos se quedaron en silencio.

Ailyn palideció, Sofía e Isabella se miraron con la misma sensación: sabían quién era antes de oír su nombre y Cassian caminó hacia la puerta sin decir una palabra, la furia contenida en cada paso.

Ailyn y las chicas lo siguieron.

Al salir, el viento frío golpeó sus rostros. Afuera, una docena de guardias vestidos de blanco esperaban y frente a ellos, Anya. Su rostro estaba pálido por el cansancio, pero su mirada no temblaba y a su lado, Jacob vigilaba cualquier movimiento de los lobos del Reino Cazador.

El aire se llenó de tensión y Cassian se detuvo a pocos metros de ella, con el ceño fruncido.

—Tienes valor al presentarte aquí después de todo lo que has causado —dijo con frialdad.

Anya respiró hondo, no bajó la cabeza, ni retrocedió. Su voz, firme y desesperada, cortó el silencio.

—No vengo a discutir, alfa Cassian. Rowan... él se está muriendo y yo soy la única que puede salvarlo.

La frase cayó como un golpe, nadie se movió y Ca