ASHTONSiempre he sido un chico que trae caos y problemas a donde llega. Mis hermanos y mi madre han tratado por todos los medios que ya no lo haga, pero siempre termino igual. Esta es la tercera escuela que me termina corriendo de sus instalaciones y no por mal estudiante, déjenme decirles, sino por mis acciones; estas, dejan mucho que desear.Ahora tendré que pedirle a mi hermano nuevamente que interceda por mí, para que me acepten en una nueva escuela. Por suerte, el curso acaba de empezar, no tendré muchos apuntes que pasar y será más fácil relacionarme con los otros estudiantes.Cuando Kellen se enteró puso el grito en el cielo, jamás lo había visto tan molesto conmigo como ahora. Ya otras veces me había amenazado; sin embargo, en esta ocasión supongo que ahora sí lo dijo en serio.Obviamente, tendré que portarme mejor, si me vuelven a echar. Estoy más que seguro de que Kellen no se tocará el corazón para quitarme todo. Por supuesto, mi madre estuvo de acuerdo, no abrió la boca e
MADISONDesde ese primer día que conocí al tal Ashton Brennan, no dejo de molestarme ningún jodido día. Estaba harta de ver su cara, de tener que aguantar sus estupideces, de ver cómo prácticamente se follaba a todas las chicas habidas y por haber de la carrera. ¡Qué imbécil! No entiendo por qué no se va a un motel o a su casa. Es más, no entiendo cómo es que no ha sido suspendido o, por lo menos, no le han llamado la atención, deberían echarlo de la escuela.Según he escuchado, las malas lenguas dicen que no es la primera universidad que pisa, puesto que varias ya lo han echado de sus instalaciones, por mala conducta, no acatar el reglamento o golpear a profesores, ¿aquí por qué no hacen nada? No entiendo.Unas semanas después, conocí a un chico, llamado Marc, realmente dulce y al que Ashton odiaba y aborrecía totalmente. Sinceramente, no entendía por qué, no es que me importe su opinión, pero había algo en su mirada que no sabía cómo interpretar. Me miraba entre furioso y ¿celoso?,
ASHTONDe verdad creí que era la primera vez que congeniábamos, ese beso, lo sentí tan real, nada que ver con las mujeres que me buscan, solo por presumir que me llevaron a la cama, cuando ni siquiera es cierto y la realidad es todo lo contrario.Es más, ella misma fue quien dio inicio al beso. Yo solo pensaba en lo suave que se sentían esos labios, en sus manos tocándome, en ese culo tan perfecto donde ahora mismo se hallaban mis manos, cuando de pronto, un terrible dolor en mi entrepierna detuvo absolutamente todo en lo que me encontraba pensado, pero sobre todo sintiendo. No obstante, me terminará pagando cada una de sus humillaciones, lo hará de la única manera que yo conozco y que sé, le desagrada.MADISONPresente…A partir de ese día, jamás volvió a meterse en mi camino, aunque me hizo la vida aún más complicada, obviamente mientras nos manteníamos ahí. Cada que me lo encontraba “por casualidad”, se hallaba con una chica diferente. Sinceramente me importa una mierda, lo que rea
MARCMe encontraba con… como sea que se llame la chica con la que ahora mismo me encuentro follando en el baño de mujeres, donde, no tenía ni la mínima idea de lo que estaba por escuchar.Desde que conocí a Madison Greyson, la verdad se me hizo una mujer verdaderamente bella, hablando en todos los sentidos, muy inteligente, capaz y segura de sí misma; no pude evitar el acercarme y entablar una conversación con ella. Además, esa sonrisa y ese cabello inigualable, la hizo destacar entre la multitud, por supuesto que también su increíble y sexy cuerpo.A partir de ese momento, ella y yo comenzamos a llevarnos cada vez mucho mejor, hasta que finalmente nos hicimos pareja, aunque con ciertas restricciones y limitaciones debido a su hermano. No ahonde mucho en el tema, pero deduje que debió ser algo demasiado intenso como para que toda su familia la cuidara demasiado. Es por eso por lo que tuvimos que mantener nuestra relación en secreto.Todo parecía ir viento en popa; sin embargo, unos me
BREENLa noche en que cambió mi vida por completo aún no logró superarla por completo. He aprendido a lidiar con ese suceso, más no he podido olvidarlo y ser feliz. Tengo muchos demonios que aún me siguen persiguiendo y temo que, debido a ello, me quedaré sola por el resto de mi vida.10 años antes…Me encontraba más feliz que nunca. Una etapa de mi vida estaba por concluir y otra por comenzar. Aunque mi mejor amiga, Amina y yo, tomaríamos rumbos distintos, ambas sabíamos que nunca nada podría separarnos. Eso, en realidad, es lo que al menos yo pensaba, pero todo estaba por tomar un rumbo bastante trágico en nuestras vidas. Estaba terminándome de arreglar para salir a una fiesta junto a ella. Amina ya me esperaba en el taxi, así que me despedí de mis padres y salí a su encuentro.—Déjame decirte, que esta noche te ves espectacular —bromeo Amina. —Sabes que solo voy a divertirme, no me interesa conquistar a nadie. Aún no me siento preparada —Amina puso los ojos en blanco.—Eres una a
ADAMA diario, me encuentro pensando en cada cosa que les haré a los hijos de puta que abusaron de mi hermana. No hay día que no lo haga, sé que disfrutaré hacerles pagar cada lágrima que derramó y que sigue derramando.Además, cuento con el apoyo y la ayuda de un gran hombre, llamado Kellen Brennan, que en poco tiempo se convirtió no solo en un socio, sino en un gran amigo y hermano. Él, al igual que yo, se encuentra en la misma situación. Desea venganza.10 años antes…Escuché cómo se cerraba la puerta de un auto. Supuse que se trataba de Breen, quien no tenía idea de que me encontraba en casa, para acompañarla el día de mañana en su gran día.Ella daría un pequeño discurso para su generación y, aunque le mentí, diciéndole que no podía acompañarla, sé que rápidamente se le pasaría el enojo al saber que era una pequeña mentira.Abrí la puerta de golpe con una enorme sonrisa en el rostro, pero esta rápidamente desapareció al ver el estado en que se encontraba.Su rostro magullado con e
BREENAmina se encontraba frente a mí, con la mirada perdida y su cuerpo cubierto por sangre. Ella me pedía que la ayudara, pero yo no podía hacer nada. Mientras intentaba hacerlo, sentía cómo se le iba la vida cada vez más rápido.Aquellos hombres se encontraban detrás de ella, tocándola mientras yo solo miraba. Trataba de moverme, pero ese hombre, me sostenía con una fuerza descomunal y me hablaba al oído. Describiéndome lo que le estaban haciendo a ella, con una risa siniestra.—No me dejes morir —fueron sus últimas palabras, antes de cerrar los ojos para siempre.Desperté dando un grito de agonía, con lágrimas en los ojos y completamente bañada en sudor, me senté en medio de la cama, prendí la lámpara de noche y subí mis rodillas hasta que tocaron mi pecho, mi cabeza colgaba entre ellas y abracé mis piernas con mis brazos, imágenes de aquella noche fatídica, mezcladas con el sueño que acababa de tener, no hacía más que agravar toda mi situación.Hacía bastante tiempo, que no soñaba
BREENY desde ese día, Randy comenzó a conquistarme, parecía intuir que no me gustaba que se acercaran mucho a mí, y eso él lo respetó demasiado, hasta que un día me preguntó por qué era así, por qué no me gustaba que me tocaran, porque no me gustaba que me abrazaran.Me aseguró que él quería hacerlo, y yo más que nadie lo sabía; sin embargo, cada vez que se acercaba, yo lo alejaba; le pedí que dejáramos de vernos, pero él se opuso, me advirtió que eso no pasaría, entonces le conté la verdad a grandes rasgos. Él estuvo atento mientras yo le relataba todo lo que sufrí durante y después, bueno, lo sigo haciendo, no obstante, en menor medida.Esa fue la primera vez que dejé abrazarme por él, me dio un beso en la frente y me aseguró que con él estaría a salvo, yo sabía que me hablaba con la verdad. Los meses posteriores a nuestra primera cita fueron progresando exitosamente, él me contaba cosas sobre sí mismo, su familia, sus amigos más cercanos, en fin, todo, y yo también hacía lo mismo.